"Otra vez de nuevo, otra vez esa mirada que penetra, esa sonrisa que fulmina... y aqui la tonta sin saber que hacer... me siento tan perdida...
-¿Qué te ocurre amor? -dijistes suavemente, con esa voz de ángel.
-Na-nada... solo que... estoy un poco cansada...
-Oh entiendo... vamos a mi casa pequeña, así podrás descansar
-No quiero serte de molestia
-No lo eres... -dijistes y acto seguido me encontraba en tus brazos, me llevabas en ellos, como a una princesa.
-¡O-oye... baja-bajame que yo peso mucho que estoy muy gorda!
-Jajajá, vamos no digas tonterias mi vida, tu no estar gorda y yo estoy muy fuerte. -y después de decir eso me sonreiste caminando conmigo acuestas.
Era un 14 de Febrero del 2012, nosotros eramos una pareja de enamorados como toda pareja.
LLegé a tu casa después de un rato y me dejastes delicadamente, como si yo fuera cristal, en el sofá color pardo.
-Cielo...
-¿Sí?
-Bésame. -dije sin más, tú sonreistes y pusistes tus manos en mis rodillas, lentamente besándome, y pude sentir esos cálidos labios en mi ser... dios mio... estaría toda mi vida besándote amor mio... porque te amo.
Ya sé que es de poco estas palabras, que son muchas mis locuras... que es inexplicable todo lo que siento por ti... y lo bueno de todo esto... es que no lo puedo negar ni remediar...
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